CULTURA DE TERROR (1)

MUERTE AL ATENEO DE CARACAS




El Ateneo de Caracas cumplió con su misión durante los gobiernos civiles y militares de López Contreras, Medina Angarita, Betancourt, Gallegos, Delgado Chalbaud, Suárez Flamerich y finalmente Pérez Jiménez. Desde entonces jugó un papel de primer orden durante las décadas democráticas de la segunda mitad del siglo XX. Al sello dictatorial, bajo la mancha emblemática del perro y la rana que distingue a la cultura revolucionaria, se deberá el cierre de esta histórica institución.

El 18 de febrero de 2008 un grupo de intelectuales , artistas y trabajadores del sector cultural firmó un manifiesto contra el ministro de la Cultura, Francisco Sesto, por lo que consideran 'persecución' contra del Ateneo de Caracas.

El 21 de enero de 2009 la directiva del Ateneo de Caracas recibió una notificación enviada desde el Ministerio de Finanzas, en la que informaba que “El Ateneo de Caracas debe salir el 4 de mayo de 2009”, La comunicación llegó un día después de que simpatizantes del partido Unidad Popular Venezolana, dirigidos por Lina Ron, entraran por la fuerza a las instalaciones y agredieran a personal que laboraba allí. <---Fuente: guía.com.ve / 18-02-2008
El 18 de febrero de 2008 un grupo de intelectuales , artistas y trabajadores del sector cultural firmó un manifiesto contra el ministro de la Cultura, Francisco Sesto, por lo que consideran 'persecución' contra del Ateneo de Caracas.

En el documento comparan al titular del despacho con Stalin y con Hitler.

Sesto criticó el lunes el estado del edificio donde funciona la institución privada. Dijo que no está bien cuidado y que han sido incumplidas cláusulas del contrato de comodato. El contrato que permite al Ateneo de Caracas usar las instalaciones vence en mayo de 2009.

Sus declaraciones fueron interpretadas como indicio de que no piensa renovarlo, y de que incluso podría apelar al incumplimiento para desalojar de su sede al Ateneo.

'Agotaré todas las instancias en el Gobierno para tratar de que entiendan la barbaridad de lo que se está cometiendo.Me comprometo ante el país y ante los trabajadores de esta institución. No voy a escatimar esfuerzos para mantener lo que siempre hemos hecho', afirmó Carmen Ramia, presidenta del Atendo de Caracas.

Recordó que la institución funciona desde hace 76 años.Anunció la suspensión del Festival Internacional de Teatro que iba a celebrarse este año.

'No es posible por la cantidad de problemas que tenemos que resolver y tenemos que priorizar los esfuerzos', explicó.Duras críticas creadores venezolanos y de las instituciones de larga data que h a n s i d o b a s e y s u s t e n t o d e la vida cultural venezolana', dice el documento de los intelectuales en apoyo al Ateneo de Caracas.

El manifiesto fue suscrito por el caricaturista Pedro León Zapata, el sociólogo Tulio Hernández, el director de teatro Héctor Manrique, y los actores Gustavo Rodríguez, Carlota Sosa, Rafael Romero, Javier Vidal, Yuly Restifo, Amanda Gutiérrez y Rosario Prieto, entre otros.

Manrique cuestionó la gestión de Sesto por el deterioro en que se encuentran las instalaciones culturales del país. 'El Teatro Teresa Carreño ha bajado 60% su actividad artística. Ahora los iluminadores son más bien alumbradores y los escenográfos, agentes de festejos', dijo, a manera de ejemplo.Los firmantes se declararon en situación de alerta y vigilancia contra el 'comisariato cultural' de Sesto, e instan a crear un 'muro de contención' contra el ministro.

Globovisión /21-01- 09
Fuente: atravésdevenezuela.com
Hoy a las 10 de la mañana, la directiva del Ateneo de Caracas recibió una notificación enviada desde el Ministerio de Finanzas, en la que informaba la culminación del comodato de las instalaciones donde opera desde hace más de 20 años el centro cultural. “El Ateneo de Caracas debe salir el 4 de mayo de 2009”, dijo Carmen Ramia, directora general de la institución.

La comunicación llegó un día después de que simpatizantes del partido Unidad Popular Venezolana, dirigidos por Lina Ron, entraran por la fuerza a las instalaciones y agredieran a personal que laboraba allí, como una medida de protesta por la presencia de militantes de la organización política Bandera Roja.

Ramia responsabilizó por los hechos de violencia de ayer en las instalaciones del Ateneo de Caracas al presidente de la República, Hugo Chávez, debido a las declaraciones que ofreció en días pasados.

“Quiero responsabilizar al presidente Chávez de todo lo que ha venido ocurriendo. No me importa Lina Ron, ni La Piedrita: todos reciben órdenes precisas. No voy a señalar a ningún ministro, no quiero saber nada de ellos. El presidente Chavez lo ha dicho abiertamente: todo el que quiera hacer algo, denle gas del bueno”, recordó Ramia.

Para ella, las acciones violentas que ocurrieron el pasado martes en las instalaciones culturales no son casuales, sino esquemas que se aplican en los regímenes totalitarios.

“En los países totalitarios suele ocurrir que necesariamente hay que violentar y perseguir todo lo que tiene que ver con los principios, valores e ideas. No puede existir una confrontación de ideas; debe haber una sola. Y todo el que no está con el régimen es un enemigo, un blanco militar, como le llaman. Estamos viviendo un momento terrible en el país”, señaló Ramia.

Cae el telón sobre la sede del Ateneo de Caracas, no sobre su memoria

Por: Diego Arroyo Gil

EL NACIONAL - Domingo 10 de Mayo de 2009

La institución, fundada en 1931 bajo la dictadura de Juan Vicente Gómez, sufre hoy uno de los trances mayores de su historia

No será muy ingenioso decir que el Ateneo de Caracas es un baúl de memorias. Sus asiduos, que son legión en Caracas y otras ciudades del país, no se refieren a él sin dejar caer en la conversación anécdotas personales, casi siempre nostálgicas, como todo lo que suena a viejo o echa el tiempo atrás en Venezuela.

Habrá quienes aún recuerden ­a estas alturas muy pocos, claro­ aquel 8 de agosto de 1931, el día de su fundación. Corrían los tiempos de Gómez y la capital era pequeña como grande era la dictadura. 22040 era el número de teléfono de la casona donde se instaló la institución, lo que demuestra el ámbito urbano a que estaba reducida, pero del cual adquirió el apoyo para ir creciendo en espiral a medida que transcurrieron los años.

María Luisa Escobar presidía entonces el organismo, que no murió con el general andino sino que aprovechó el momento para tomar aire y comenzar un peregrinar que tiene fama de leyenda en la crónica citadina, pues no son pocos ni aburridos los cuentos que se escuchan sobre las casas que sirvieron de albergue a la actividad ateneísta.

Así, mientras por la Presidencia de la República desfilaban militares y civiles: López Contreras, Medina Angarita, Betancourt, Gallegos, Delgado Chalbaud, Suárez Flamerich y finalmente Pérez Jiménez, el Ateneo siguió cumpliendo, "con recato y admiración ­en palabras de Oscar Guaramato­ su fajina sembradora".

Los aires mejoraron cuando el avión del dictador alzó vuelo en busca de salvación la madrugada del 23 de enero de 1958. Fue el gobierno del contralmirante Larrazábal, quien ejerció la titularidad como un civil, el que cedió la casa de los Ramia ­expropiada a la familia tiempo atrás­ para que funcionara como nueva sede del Ateneo. Cinco días antes de la caída del régimen, María Teresa Castillo había asumido la dirección de la institución en reemplazo de Anna Julia Rojas, quien dejó en manos de la presidenta entrante un legado de ardua brega.

Pero con el tiempo esta casa también se hizo pequeña y en la década de los años setenta se iniciaron los trámites para la construcción de un domicilio más amplio y permanente. Hubo que esperar hasta 1983 para que estuviera listo el edificio que el arquitecto Gustavo Legórburu diseñó especialmente para la institución. La gestión de Luis Herrera Campíns, entonces Presidente de la República, se lo cedió en comodato, como correspondía.

Con la inauguración de los nuevos espacios, la actividad artística se incrementó y las discusiones sobre actualidad y política corrieron a cuenta de un gran interés y entusiasmo que circularon en las décadas posteriores como fuego en hilo de pólvora. Fue allí donde el proyecto de Chávez encontró una plataforma de lanzamiento público antes de que ganara las elecciones presidenciales y fue allí donde, obtenido el triunfo, ofreció su primera rueda de prensa como nuevo primer mandatario.

Dos lustros más tarde, ese mismo gobierno es el que ha decidido no renovar el comodato de la sede actual del Ateneo de Caracas, lo cual obliga al organismo a desalojarla antes del 4 de agosto de 2009, a fin de que ésta se transforme en núcleo de la Universidad de las Artes.

Artes son, también, las que durante muchos años allí han encontrado residencia: no sólo las escénicas, que tuvieron en Carlos Giménez y Horacio Peterson a dos promotores dedicados, sino también la literatura, la danza, la música, la plástica y el cine. La creación en 1973 del Festival Internacional de Teatro fue nada más uno de los logros del movimiento ateneísta. ¿Dónde, sino en la vieja casona de Los Caobos y luego en el edificio de Legórburu, José Antonio Abreu dio a conocer al mundo cultural venezolano su proyecto musical? El Ateneo de Caracas recibió a Alejo Carpentier, a Miguel Ángel Asturias, a Pablo Neruda, a William Faulkner, por no hablar de todos los escritores, cineastas, pintores, grabadores, actores y músicos venezolanos que allí tuvieron un centro de encuentro: desde Ludovico Silva hasta Inocente Palacios, desde Miguel Arroyo hasta Alejandro Otero, desde Antonio Estévez hasta Morella Muñoz.

Tras la decisión de no renovar el comodato, es de prever que, aunque la infraestructura del edificio se mantenga, puedan variar detalles. Por ejemplo, al igual que como ocurrió con la antigua librería de Monte Ávila en el Teatro Teresa Carreño ­hoy Librería del Sur­, donde antes se observaba el logotipo del Ateneo de Caracas se imprimirá el emblema que desde marzo de 2006 el Ministerio de la Cultura emplea para identificar a todos sus entes asociados: la mancha del perro y la rana. --->